"Barça" nunca ha sido sinónimo de incompetencia hasta ahora

Varios jugadores del conjunto culé no dieron la talla en el partido contra los belgas el pasado miércoles 13.

El pasado miércoles, el Fútbol Club Barcelona sufrió una derrota desconcertante contra el Amberes en el Bosuilstadion. Aunque el marcador final fue 3-2 a favor de los belgas, lo que realmente impactó fue la incompetencia de varios jugadores culés, que dejaron mucho que desear tanto para sus admiradores como para el equipo en sí.

Dos nombres resaltaron entre las filas azulgranas como los únicos que realmente mantuvieron su enfoque en el terreno de juego: Ferran Torres, quien marcó un gol en el minuto 35, y Marc Guiu, que aportó otro en el minuto 91. A pesar de estos esfuerzos individuales, la derrota ante un Amberes que aún no había sumado puntos en la Liga de Campeones ha sido devastadora para el Barcelona.

El principal responsable fue Xavi Hernández. La derrota no solo recae en los jugadores, sino también en el entrenador que no logró motivar al equipo y pareció pasar por alto los errores evidentes cometidos a lo largo de la temporada y que se negó a rectificar. Además, minimizó la derrota frente a la prensa de forma preocupante, cosa que sorprendió a muchos, contrastando con la actitud más competitiva de temporadas anteriores.

El defensa francés Jules Koundé también forma parte de esta lista. Apareció desconcentrado durante gran parte del partido, un comportamiento inusual para ser él. Su confianza aparentemente excesiva y la subestimación de los oponentes contribuyeron a su desempeño por debajo de su estándar habitual.

Oriol Romeu, por su parte, demostró una actuación irregular a lo largo del partido. Su rendimiento estuvo por debajo de las expectativas, dejando claro que tampoco se molestó en esforzarse por estar a la altura de sus capacidades. Esta inconsistencia preocupa a los seguidores culés entre otros, ya que este comportamiento se está convirtiendo en una rutina últimamente.

Por último pero no menos importante, la inclusión de Robert Lewandowski en el partido por culpa de Hernandez, Laporta y hasta Deco, generó controversia. Aunque es un delantero con habilidades notables, su trabajo en este partido consistió más en adornar el campo por Navidad que en jugar. No logró ni acercarse a la meta contraria, planteando la pregunta de si su inclusión en la alineación fue una decisión acertada.

En conjunto, la derrota ante el Amberes deja al Barcelona con mucho que reflexionar. La responsabilidad recae no solo en los jugadores, sino también en la dirección del equipo. Las lecciones aprendidas de este encuentro podrían ser cruciales para el futuro del club en la competición europea.