Remontada de campeón para meter presión al Madrid
El conjunto culé remonta un 0-2 con un doblete de Lewandowski y un gol de Joao Cancelo para llevarse los tres puntos que le sitúan líder de la competición.
El Fútbol Club Barcelona remontaba en el tramo final un 0-2 ante el Celta de Vigo para situarse con líder provisional de la liga. Los goles visitantes de Larsen y Douvikas no fueron suficientes para lograr la victoria. Los azulgranas tardaron en reaccionar, pero lo hiceron con un doblete de Lewandowski y un tanto de Joao Cancelo.
Xavi Hernández apostaba por un once muy parecido al que sacó en la victoria ante el Antwerp en Champions por cinco goles a cero, con solo tres cambios: Marcos Alonso por Balde, Oriol Romeu por Gavi y Ferran Torres por Raphinha. El apodado "tiburón" parece estar respondiendo muy bien cada vez que entra desde el banquillo y se ha ganado con creces partir desde once inicial. El resto repetían titularidad, destacando los dos Joaos que parecen haber encajado a la perfección en el esquema del equipo.
Por otro lado, Rafa Benítez salía con el mismo once respecto a su último partido liguero, donde perdieron en casa 0-1 ante el Mallorca. Los celestes han sumado cuatro puntos de 15 posibles en este inicio de liga, únicamente una victoria y un empate por tres derrotas. Unas estadísticas muy negativas para llegar a uno de los campos más complicados de la categoría.
El balón empezaba a rodar en el Estadi Lluis Companys y el Barcelona empezó a dominar el balón sin prácticamente ninguna oposición de su rival. El Celta era consciente de lo difícil que es arrebatarle la posesión al Barça y optó por establecer un bloque medio-bajo y dejar a su rival proponer. Al conjunto visitante le salió bien el plan inicial porque no solo no concedió ocasiones de peligro, sino que con el paso de los minutos logró ganar terreno y empezó a incomodar al Barça.
El Celta de Vigo se adelantaba en el marcador con un gol de Strand Larsen en un intento de contraataque frustrado por parte de los azulgranas. De la Torre recuperaba y asistía al noruego para que este marcara el 0-1. Los de Xavi habían salido con un ritmo muy tranquilo y lo pagaron de la peor manera.
Los locales reaccionaron a los pocos minutos y Joao Felix pudo empatarlo con un remate desviado tras la primera triangulación de los culés. El portugués estaba siendo el jugador más peligroso para el Barça y tuvo otra ocasión clara a pase de Frenkie en la que el control se le fue largo. El centrocampista neerlandés no duraría mucho más en el terreno de juego y se retiraba por unas molestias en el tramo final del primer tiempo. En su lugar entraba Gavi.
El Barcelona no mostraba síntomas de mejora y el paso de los minutos favorecía a un Celta que, mucho menos que defender el resultado, pudo marcar el segundo. Un centro del exazulgrana Mingueza era rematado por Larsen y Ter Stegen lograba una gran parada. Milagrosamente para el Barça, ni Bamba, ni De la Torre lograron marcar en los rechaces posteriores. El partido llegaba al descanso y casi que esta era la mejor noticia para el Barcelona, para aclarar ideas y ajustar todo lo que no estaba funcionando.
Para el segundo tiempo, Xavi no quiso esperar ni un minuto para reaccionar y daba entrada a Lamine Yamal y Ronald Araujo. Se retiraban Marcos Alonso y Oriol Romeu. El ex del Girona no estaba haciendo para nada un mal partido, pero ante la necesidad de remontar, el técnico sacrificó al jugador menos creativo. El Barça se quedaba con defensa de tres y con un centro del campo donde Gavi era el jugador más defensivo. A pesar de los cambios, al Barça se seguía costando un mundo generar peligro. De hecho, la ocasión más clara en los primeros minutos del segundo tiempo, la tuvo Araujo con un disparo lejano. Xavi continuaría moviendo el banquillo y daba entrada a Balde que sustituía a Christensen. El Barça no dejaba de asumir riesgos, pero no le quedaba otra si quería meter un gol que empatara el partido e iniciara la remontada.
El empate pudo llegar en la ocasión más clara de los locales tras una perdida del Celta. Un gran pase de Gundogan que dejaba mano a mano a Ferran con Iván, pero que el delantero español no lograba transformar en gol. A falta de poco más de quince minutos, entraba Raphinha. El Barça estaba volcado a la ofensiva y eso comprometía a una defensa con cada vez menos efectivos, que sufría cada contragolpe del Celta. Y en uno de estos contragolpes llegaba el 0-2 Douvikas. La contra no pudo estar mejor ejecutada y Iago Aspas entregaba un gran balón al griego para que este definiera a la perfección ante Ter Stegen.
Cuando parecía que el segundo del Celta era definitivo, Joao Felix asistía con mucha clase a Lewandowski y este picaba el balón ante la salida del portero para recortar distancias. El gol avivó a jugadores y afición y se empezaba a respirar un ambiente de remontada en el Estadi Lluis Companys. Y así iba a suceder, antes de cumplirse el noventa de partido, Gavi ponía un balón perfecto al interior del área para la entrada de Joao Cancelo que, de primeras, marcaba el 3-2 definitivo. El Barcelona marcaba tres goles en seis minutos y firmaba una remontada épica, no tan solo por la dificultad del marcador, sino por las sensaciones que estaban mostrando hasta el primer gol.
Con esta victoria, el conjunto azulgrana se coloca líder provisional de LaLiga con 16 puntos, a falta de disputarse el derbi entre Atlético de Madrid y Real Madrid. Xavi debe hacer mucha autocrítica porque tras dos buenos partidos, el Barça volvió a mostrar una versión mediocre de juego. Aunque también ha demostrado capacidad para reaccionar y valentía en los cambios que han acabado dando la remontada.
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