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Flick dejó a Ancelotti en fuera de juego

La estrategia que Hansi Flick a implantado y que tanto éxito le viene dando al FC Barcelona se repitió en el Clásico y el técnico italiano no supo contrarrestarla. Tanto es así que el Real Madrid cayó hasta 12 veces en posición antirreglamentaria, focalizando en un Mbappé totalmente crispado.


La apuesta del entrenador azulgrana no pilló desprevenido a ningún espectador que presenció el partido del pasado domingo. De hecho, el alemán ya dejó claro que ni las grandes citas como la visita del Bayern de Múnich en Champions, lo iban a hacer cambiar de planes. Debió pensar que lo que funciona no debe modificarse y así fue. La zaga culé siguió valiente, coordinada y milimétrica para impedir que el supuesto mejor futbolista del mundo anotara y adelantara a los blancos.


Sin embargo, el primer gol del Barça, llegaría precisamente por un desajuste defensivo clamoroso, en el que Mendy habilitaba a un Robert Lewandowski que no perdonaría. Marc Casadó filtró el balón como cuchillo en mantequilla, mientras la línea merengue era anárquica y de cuatro alturas completamente distintas. La actuación de los Rüdiger, Militao, Lucas Vázquez...dista mucho del nivel que está mostrando una defensa que por desgracia pasará de puntillas por el tridente: Lewandowski, Raphinha, Lamine Yamal.


Aún así, hay que destacar como la dupla Iñigo Martínez-Cubarsí es el artífice y la consolidación de un orden y disciplina tácticos que anularon al vigente campeón de Europa y de Liga; el Real Madrid. El Santiago Bernabéu presenció como su equipo era totalmente incapaz de chutar entre los palos en la primera mitad, evidentemente sin contar el gol anulado de Mbappé. Pero es que los locales se marcharon al descanso sumando ocho fueras de juego, de los cuales seis fueron de su flamante fichaje.

Fuera de juego Madrid

Pero para mayor frustración, ya en la segunda parte, el francés vería como su segundo tanto de la noche también sería anulado por posición antirreglamentaria. Además, tanto el 0-3, como el 0-4 llegarían en transiciones de un FC Barcelona que sí supo encontrar la espalda de los defensores merengues, cuando los madridistas se volcaron en busca del empate.


El planteamiento de Ancelotti era claro; buscar a Vinicius y Mbappé al espacio a través de balones largos, pero los Koundé, Balde y compañía, en cuanto veían armar los desplazamientos, realizaban un paso hacia adelante. Los blaugranas invalidaban cualquier acción ante la desesperación de una grada que terminó vaciándose antes de concluir el Clásico y viendo como su equipo cayó en la trampa hasta 12 veces y su estrella las mismas que su dorsal.

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